martes, 27 de diciembre de 2011

Encontrarte pero... ¿Amarte u odiarte?


:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

11.- Un mar de dolor



Bella pov



-buenos días, Sra. Cullen. Somos de la agencia de adopciones, hacemos una visita de rutina para calificar si son aptos para recibir uno de nuestros niños- se presento un hombre alto, moreno, para nada luciendo como trabajador social, el otro es un hombrecito asustadizo, o eso aparenta, es despiadado.



-Por supuesto, pasen, Cariño llegaron los señores- informe con voz fuerte, nuestra gente estará grabando.



-buenos días, ¿Qué podemos hacer por ustedes?- pregunto sonriendo Edward.



-bueno venimos a evaluarlos, encenderé mi computadora si no les importa-



-adelante por favor-  respondió sonriendo naturalmente.



Como cuando… no es el momento.



Mire el aparato, “computadora” mis huevos, es un interceptor de última generación, o eso creen, mi equipo uso ese el año pasado, una antigüedad, ya teníamos el último modelo y no es afectado por este. No les serviría.



-¿algo de tomar?- pregunte sonriendo.



-no gracias, quizá quiera sentarse para empezar con las preguntas-



No es una petición, me senté junto a mi “esposo” me tomo de la mano y me abrazo. Un poco fingido y un poco en serio. Carajo su contacto me esta distrayendo. Y mucho.



-perdón, me distraje en otra cosa ¿me repite la pregunta?- Edward me miro con expresión de asesino en los ojos.



 Lo es. Y los que están sentados frente a nosotros también.



-claro señora, le preguntaba ¿cuánto lleva con el trámite de la adopción?- Mire a Edward, no había escuchado su respuesta. Carajo.



-más del que me gustaría, mire, entiendo que estas  preguntas son de rutina, ¡pero estamos desesperados! ¡¡Lo hemos intentado todo, y nada funciona!! ¡¡Por favor, yo solo quiero tener un bebe entre mis brazos!! no me importa como sea, o que debo hacer para conseguirlo, ayúdennos, son nuestra ultima esperanza- dije llorando.



Qué lindo me salía, Jacob se estará cagando de la risa. Y mi amigas también.



-le entiendo pero esto lleva su tiempo, necesitamos saber que son las personas adecuadas, mire habrá una reunión en unos días, otras parejas que también tratan de tener un niño, estaremos en una especie de retiro para conocernos más, ¿les gustaría asistir? Hay un costo por supuesto, de recuperación ya saben, les daremos una tienda, las tres comidas y por supuesto la información que desean-



-estamos interesados, ¿Dónde será?-



-nosotros les avisamos una hora antes, más o menos, aun no tenemos la dirección correcta, secretarias, todo traspapelan- dijo riendo.



-bien, estaremos pendientes, gracias- dijo mi esposo, me salía natural.



Carajo.



¿Por qué no podía dejar de amarlo?



Y otra vez estoy distraída. Un apretón no muy amable me regreso a la realidad. Sonreí mientras se marchaban.



Apenas se montaron en su auto y se alejaron lo suficiente, Edward puso música ruidosa con ganas.



-¿Qué carajos te pasa? ¿Te das cuenta que nos matarán al primer tropiezo? Si no eres capaz de hacer esto dilo ahora y evítanos la tragedia- rugió apenas levantando la voz.



Casi gritando



-lo siento tienes razón, te pido me disculpes, no pasara de nuevo-  Carajo ahí estoy llorando de nuevo, llanto real.



Corrí hasta la habitación, me siguió.



-Bella ¿Qué pasa?- pregunto suavemente, eso acabo conmigo.



Sin decir nada llore abrazada a él, sé que los demás están escuchando pero ya no puedo mas, tengo muchos años soportándolo en silencio. Con la voz tan baja como pude.



-me dejaste, te acostaste con otra, me abandonaste, con las maletas hechas para vivir juntos, ni una llamada en tres semanas, luego un simple “no eres suficiente para mi” y luego tu sobre ella, haciendo lo que solo me hacías a mí, apareces siete años después y finjes ser mi esposo, me abrazas, duermes conmigo, me besas, me tocas, te acercas… es más de lo que puedo soportar, ¿no lo vez? Me doy de topes entre odiarte por todo lo que me hiciste sufrir o amarte por todo lo que aun me haces sentir. Te odio y te amo por igual y esto perdiendo la razón y acabare cagándola si no arreglamos esto y no me iré sola, me llevare a todo el puto equipo, esto terminara mal para todos y es tu maldita culpa, nunca debiste regresar – llore más fuerte.



Entre al baño, no salí.



Edward pov



Sabía que la haría daño cuando decidí engañarla, pero escucharla de viva voz, ver como esta por mi culpa es más de lo que imagine, la había destruido, no solo destrozado, la mujer que ama paso de un infierno a otro, por mi. Me odie por hacerle esto.



¿Cómo componer su vida? ¿La mía?



¿Cómo sacarla de esto si yo mismo no hallaba la salida? Mire hacia la pared frente a la cama.

La luz esta parpadeando.



-Bella, amor, necesito entrar, hum, tengo mis…- salió con los comunicadores en la mano.



No me miro.



-¿esto amor?- pregunto.



-soy Emmet, Alice va para allá, los sacara con el pretexto de invitarlos a cenar en Seattle, arreglen este asunto entre ustedes o todos estaremos jodidos, Isa un descuido mas y cancelo todo-



-sí, cariño justo eso, gracias- respondí.



 Bella esta llorando otra vez, sin hacer ruido, sé que era por mí. Me acerque, necesito abrazarla, se alejó sin hacer ruido, negó con la cabeza. Sonó el timbre. Me dirigí a abrir.



-Edward que gusto verte, no digas nada, vine a llevarlos a cenar y no aceptare un no como respuesta, así que avísale a tu esposa y salgamos, les espero en el auto. Muévanse. Tengo hambre- dijo Alice antes que pudiera hacer o decir nada.



-cariño, arréglate, saldremos a cenar- dije desde la escalera bajando el volumen de la música.



-si amor, me arreglo, ¿Quién es?- carajo ¿como pregunta eso?



Me gire sabiendo que no me vería.



¿Cómo responder a eso?



-ah no me digas, ya sé, solo ella viene sin avisar y sin importar la hora- subí y se estaba dando de golpes en la frente, estaba realmente mal.



La detuve, tome sus manos, bese su frente. Las cámaras grababan todo. Alice sonó el claxon.



-huy mejor nos apuramos- me puse otro pantalón y una camisa.



Tome lo básico, la cartera, el teléfono, las llaves, Bella se cambio la ropa, se maquillo en tres minutos, se cambio los jeans, zapatillas y listo.



-hola, ¿A dónde me llevaras?- pregunto Bella subiéndonos al auto.



-hay un restaurante muy bueno, en uno de los hoteles del centro, me lo recomendaron- dijo apenas arrancando, se incorporo al tránsito y un auto nos siguió.



Todos lo vimos, otro auto, de la agencia se atravesó chocándolo, estaremos libre esa noche, solo una noche necesito para arreglar este desastre, al menos para empezar.



¿Y cómo empiezo? ¿Por qué la puta agencia no te daba un curso de “cómo arreglar el corazón que rompes por pendejo”?



Nada en el maldito entrenamiento me ha enseñado a qué hacer si el amor de mi vida es mi compañera de misión y de paso asesina al borde del quiebre por mi culpa.



Llegamos al sitio, solo por si alguien nos había seguido, Alice se quedo durante la cena, Jasper apareció  fue una linda cena entre cuatro, o lo habría sido si lo todo lo que platicamos hubiera sido real, mentira tras mentira, carajo Bella es buena, se invento un viaje al Caribe de ensueño,



¿Porque es inventado?



¿O no?



¿Habrá ido con alguien más?



¿Jacob?



Sabía que eran compañeros desde que iniciaran y que en todas las misiones de ella, él estaba, a veces como equipo táctico donde las chicas también participaban y a veces como encubiertos.



¿Habría pasado algo entre ellos? 



“Creo que de los hombres el único ha sido Jacob y eso por la misión UK, fingía ser prostituta y mi compañero su proxeneta. Casi me la creo”  “hey que no le hice casi nada, no me dejo terminar” “no le aguantaste el ritmo”



Cada palabra regreso con fuerza. La mire por un momento. Reía con lo que Jasper decía. Me perdí parte de la conversación.



-te lo juro, parecía trapeador, debo decir que jamás vi a Edward ser tan bestia en algo…- Jasper seguía con su relato.



-vaya, solía ser más resistente al licor, gracias por esto Alice- dijo sonriendo y supe que no se refería a la cena.



-lo que sea por mis mejores amigos, hum Jasper y yo nos vamos, ¿les llevo?-



-no, Alice creo que esta noche aun no acaba para nosotros, pero gracias. ¿Un trago antes?- me miro sería.



Solo un segundo antes de sonreír



-seguro, vamos al bar- pagamos y salimos del restaurante, como pensé, nos habían seguido, carajo.



 Apenas entramos al bar, el hombrecito se fue.



-¿Qué van a tomar?- pregunto Jasper.



Pedimos y se marcho.



-iré ayudarlo-



-no Alice yo voy- Bella no quiso quedarse a solas conmigo.



-¿Qué necesitas?- pregunto el duende apenas mi chica se levanto.



Sonreí.



-información, de ella, de las misiones, pero no los reportes, sino lo que pasa en ellas, específicamente la misión…-



-¿UK? ¿Jacob? ¿Relaciones? ¿Sexo?, ya la tengo, todo, las chicas hablan y mucho, estuvimos revisando el surtido  después que se fueran, con los guisantes en el horno. Pero no puedo decirte mas, ahí vienen- en otras palabras mientras revisaban las armas sin los comunicadores ella se entero de ese asunto.



Una hora después de estar tomando, al menos Bella y con ganas, decidimos que era tiempo de sepáranos, reserve una habitación y la subí, se abrazo a mí en el elevador y no me soltó aun después de entrar.



-¿quieres hablar?- susurre en su oído mientras colocaba un interceptor.



No hay nadie siguiéndonos pero no me arriesgare. Seguramente un equipo amigo estara cerca, no nos dejarían sin protección. Pero esto no quiero que lo escuchen. No estarán contentos.



-no, solo bésame…-



-Bella no creo que debamos…-



-carajo Edward, te estoy pidiendo que me beses, no que te quedes conmigo, pero está bien, no lo pediré nunca más, ya me he humillado demasiado por ti, déjalo- me empujo apenas, dos pasos en dirección de la cama y tuve que agarrarla antes que llegara al suelo.



-mejor será que duermas, estas realmente  ebria-



-así te gustan, ¿no?, quizá así te animarías a tomarme, lamento no ser como ella, después de todo, la puta de Tania te convenció, aunque ya no somos muy diferentes sabes, después de todo, para este tiempo sabes a cuantos tipos me he…-tape su boca.



No quiero escuchar el resto.



-¡¡¡cállate!!! Bella solo cállate, no te pareces en nada a esa mujer y no quiero saber a cuantos… solo duérmete- exigí molesto, muy molesto, la vena de celos esta a nada de explotarme.



Carajo, no es esto lo que quiero. Un toque en la puerta me alerto, no traje armas, pero el cuchillo de mantequilla será perfecto. Me acerque a la mirilla. Eleazar. Abrí



-dice Carmen que esto le corta la bebida y no te preocupes, estamos Irina y yo en la habitación de junto y Emmet con Kate en la de enfrente, la otra la ocupa Jacob. No hay micrófonos, no escucharemos nada. Arregla tus asuntos con calma.



-¿Quién esta monitoreando la casa?- pregunte



-Esme mando un equipo de vigilancia, para que pudiéramos cuidarlos-



-¿Carlisle sabe?-



-él mando a Alice-



Suspire, vaya todo mundo sabe de mis asuntos, genial, simple y sencillamente genial, puedo entrar en la mafia coreana, matar al tipo y salir sin que nadie sepa que fui yo, pero cuando intento arreglar mi situación amorosa todo el equipo se entera. Cerré después de despedirnos.



Regrese a donde Bella estaba, dormía profundamente, tocaron la puerta de nuevo. Alice.



-ahora si te diré todo- anuncio apenas entro.



-ven, acá, no quiero que nadie sepa, sigue desde donde te quedaste…-

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

No hay comentarios:

Publicar un comentario