viernes, 23 de diciembre de 2011

Solo te necesito a ti


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Capitulo 12.- Ahora sí, un encuentro familiar….

Bella pov

No necesitamos mas incentivo pare dejar nuestra pasión de lado que la simple mención de la vida sexual de nuestra hija, Edward casi estalla de enfado ante la mención siquiera de la palabra sexo unido al nombre de su hijita.

Eso es digno de verse. Aunque sentirlo y canalizarlo es otra cosa muy diferente pues yo no me sentía aprehensiva en ese aspecto y nada es comparable a lo posesivo que se siente Edward, después de todo su bebe apenas tenía 100 años pasaditos.

Lo que él no sabe es que nessie había dejado de ser señorita hacia mucho y Jacob tiene suerte de estar muerto. Y yo de haber podido bloquear ese recuerdo en mi hija antes de que su padre lo viera.

-¡¡¡Emmet ¡!!– Grito al llegar a casa de Esme – ahora si te mato donde le des ideas a la niña… –

-¡¡¡¿Cual niña papa?!!! ¡¡¡Tengo más de 100 años!!! – grito la ofendida mujer desde el sofá.

-¡¡¡Y podrás tener 1000, antes de que pienses en sexo!!! ¡¡¡¿Está claro?!!! – dijo en un rugido casi animal mirándonos a todos por igual antes de posarse sobre la fémina en cuestión.

-sigue soñando – exclame sin poder aguantar más.

Me miro con confusión pero fue interrumpido cuando nessie se abalanzo sobre mí con besos, abrazos y miles de preguntas todo al mismo tiempo

- Ven vamos arriba y te cuento todo- dije tomándola de la mano.

Platicamos por 2 días enteros sin interrupciones, poniéndonos al día, aclarando dudas mutuas, después de todo fue más de un año sin verla. Por fin la convencí de informar a su padre sobre su virtud no tan intacta. Después de todo, que tanto puede hacer ahora que Jacob no esta.

La tarde paso de maravillosa forma, con toda la familia reunida como en los viejos tiempos, Emmet y sus bromas, Rosalie tratando de controlarlo, como si fuera posible, Alice hablando de hacer compras de navidad, nessie peleando con su padre por poder ponerse un vestido corto según su padre de “manera indecente” para una fiesta con humanos. Carlisle y Esme riéndose agradecidos de no tener que pelear más así con sus muy crecidos hijos, Jasper tratando de relajar en vano a mi muy ofendido esposo.

Y yo feliz de que mi mundo sea de nuevo perfecto, como siempre debió ser, ya no me toman por sorpresa las emociones, las siento, asimilo y canalizo a una velocidad de rayo, la misma que la practica me da.

Eventualmente las cosas volvieron a su curso normal, otro año esta por empezar, el último del instituto, al cual habíamos regresado, para mi fortuna la escuálida jamás regreso, se cuenta que la mandaron a un internado en alguna parte de suiza o algo así.

Por fin mi vida h tomado su curso de nuevo, las dudas, miedos, exaltaciones etc. ha quedado atrás, no habrá nada que me separe de mi familia de nuevo, o que me saque de control, esa parte esta dominada.

Por fin y después de tanto.

Eleazar regreso cuando supo que estaba en casa, tenía mucha curiosidad sobre mi “año marino” y en cómo había podido superar y avanzar en la empática materia de mi nueva “habilidad”.

-Entonces ¿solo te quedaste bajo el agua?- pregunto intentando comprenderlo.

-sí, solo me quede ahí, hasta que pude controlar mi ración– conteste con risas.

- ¿cómo te alimentaste ese tiempo? –

- bueno, es un lago, los animales llegaban a beber y aprovechaba, no estaba congelado aunque no podría decirte cual era su temperatura, a mi me parecía agradable-

-Pero eso aun no explica porque no tenía visiones de ti, simple y sencillamente desapareciste de mi radar, era tan frustrante, después de 6 mese me empecé a cuestionar mi habilidad – se quejo Alice.

-Ya olvídalo, Bella está en casa y es lo único que importa – intervino Edward

-Bueno, algo está claro, seremos una gran familia otras vez, ya que hemos decido terminar el instituto acá, así que ¿están listos hermanitos? – nos miro nessie  con burla.

-¡¡¡solo si tu estas lista para pasar los próximos 100 años castigada, pareceré más joven pero sigo siendo tu padre!!! ¡¡¡ No te iras de parranda cada que quieras jovencita, olvídalo!!! – estallo Edward, mientras los demás nos reíamos sin control.

- ¡¡¡¡Papa!!!!  Mama ayúdame – se dirigió a mí.

-¡¡¡¿Yo?¡¡¡¡ ¿qué puedo hacer? apenas soy una adolecente más joven que tu, según me puedo acordar, tú misma lo dijiste hace como 10 años, ¿no? – remate.

-Ah de eso si te acuerdas ¿verdad? solo cuando te conviene –me reclamo muy enfadada.

-Basta Renessme, es tu madre y moderas tus comentarios – Espeto Edward.

-Lo siento mama, lo siento papa, tienen razón – se disculpo sinceramente.

-¿Quien quiere jugar luchitas afuera? es una noche preciosa – exclamo Emmet, mientras nos miraba a  todos.

-Yo voy, siempre he querido saber si puedo patearte el trasero – dijo Eleazar dirigiéndose a mi hermano mas grande, lo miramos con asombro.

-Vas a perder anciano- exclamo Emmet desde la puerta.

-Creo que podre enseñarte un paso o dos de cómo poner a Emmet sobre su espalda con el mínimo de esfuerzo - susurre a Edward.

-¡¡¡No te atrevas Isabella!!! – Grito Emmet desde el límite del bosque – solo fue una vez y no sucederá de nuevo- Concluyo.

-¿De qué habla?- me miro mi esposo 

- hay amor, esto no te lo conté y al parecer Emmet lo olvido si aun no te has enterado. Ven, mírame - dije tomando su cara entre mis manos, mas por el placer de tocarlo que por necesitar hacerlo.

Mi habilidad de dejarlo entrar a mi mente bajando mi escudo es genial. Después de un rato, rompió en risa.

-Sabía que le patearías el trasero algún día – dijo aun divertido  -Emmet, yo sigo – anuncio desde la sala.

-Isabella Cullen, estas muerta – respondió desde el patio el enorme oso-vampiro-cuñado-hermano.

– Desde hace más de 100 años – dije en respuesta.

-Bueno ¿nos dirán que es todo este relajo? – pregunto Esme muy divertida.

-¡¡¡No se atrevan!!! – grito Emmet, de manera innecesaria pues ya estábamos afuera viendo jugar a Jasper contra Rosalie.

-Bella peleo con Emmet en Europa, le gano con tanta facilidad que el oso no sabía qué lo golpeoa, después de 5 tiradas se rindió casi llorando como bebe- finalizo Rosalie

-Amor, lo prometiste – lloriqueo Emmet.

-No, prometí no decir como lo hizo, nunca dije que no lo contaría – se burlo Rosalie.

-Y mi mujer me apuñala, que duro – fue la respuesta lastimera de Emmet, por lo que todos nos empezamos  reír.

Sí,  mi vida esta en el camino que debe.

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