¿Y mi final feliz?

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Capitulo II

Afianzando Lazos

-Emmett, Alice. Fue un placer conocerlos – me dirigí a ambos despidiéndome, ya que por lo que se veía seguirían discutiendo sus diferencias un buen rato – gracias, por todo. Alice, te veo mañana. 

- Bella, espera – me detuvo – necesito hablar un segundo contigo – camino unos pasos lejos de Emmett. 

- Dime – conteste mientras la seguía. 

Se giró repentinamente dándome un leve mareo que deje pasar. 

-¿Quieres que te llevemos a tu casa? ¿Qué te parece mi hermano? ¿Podemos hacer el trabajo de literatura, juntas? ¿Quieres ser mi amiga? – me lanzo una tras otra cada pregunta sin dejarme espacio a contestar. Parecía nerviosa. Ja, y pensar que esa debía ser yo. 

- Bueno Alice…. – tome aire lentamente dándole un toque de suspenso a mis respuestas – no sé si entendí bien tus preguntas – sonreí. Mientras parecía que ella iba a repetirlas por el gesto de contrariedad en su rostro la mande a callar poniendo mi dedo sobre mi boca en señal de silencio, logrando un remilgo de parte de Alice – primero…. No es necesario, voy al hospital a ver a mi papa. Tu hermano… mmm… es gracioso. – entre respuesta y respuesta me tomaba mi tiempo, toda una tortura para la duendecilla que tenía en frente – claro que podemos hacer el trabajo juntas y…. – deje lo que estaba segura le interesaba más para el final. Agache mi rostro intentando esconder mi cara, no porque no quisiera serlo, sino porque la risa amenazaba con salir y aunque nunca había torturado a nadie (bueno, excepto a mi hermano. Pero Hey, era justificado) el hacerlo con Alice se sentía divertido – apenas te conocí – suspire – pero creo que podemos ser amigas. 

Espere oír gritos, ver saltitos o un golpe por su parte por haberla torturado, pero nada. Tenía una estatua frente a mí que me miraba fijamente por lo que empecé a preocuparme. No reaccionaba. 

-Alice, estas bien – le pregunte acercándome lentamente a ella temerosa de su reacción. Nada. Voltee a ver a Emmett pidiendo auxilio pero solamente una sonrisa burlona se mostró en su rostro. ¿Me iba a dejar a mí con esto, sola? 

- Lo sabía, lo sabía, lo sabía…. – empezó a gritar después de unos segundos, asustándome hasta los huesos. – Oh, Bella… gracias, gracias, gracias – me dijo dando brinquitos de un lado para otro alrededor de mí. 

- Emmett, yo te lo dije - le grito a su hermano que ahora si se dignaba a acercarse a nosotras. 

- Que bueno enana – sonrió ampliamente. 

- Alice, por favor… no vuelvas a hacerme eso – le pedí después de recuperarme del susto. 

- Ups… - se limitó a decir con esa sonrisita suya. 

- Eso será difícil – sentí a Emmett contestar detrás de mí. Se veía aún más intimidante desde esa posición. 

No me quedo más que asentir, solo esperaba que no fuera cosa de todos los días porque si no me daría un paro cardiaco con esos sustos. 

-Ah!... y Bella – hablo ya Emmett frente a mi abrazando a su hermanita – JAMAS – remarco la palabra – apuestes contra Alice. Ella lo sabe todo. 

- No todo Emmett – finalmente se dignó a hablar la muy desconsiderada. 

- Bueno, ya todo muy bien, pero me voy – se me hacía tarde y papa me esperaba. Me acerque a ellos para despedirme pero unos enormes brazos me detuvieron. 

- Alto ahí Belly Button – Emmett, quien más – nosotros te llevaremos en el Batimovil. 

- ¿Batimovil? – preguntamos Alice y yo al mismo tiempo. Yo viéndolo con gracia y Alice con las manos en su diminuta cintura. 

- Soy Batman, su superhéroe – brinco de un solo frente a nosotras – y estoy aquí para rescatarlas – agarro su chamarra como si fuese una capa. 

La escena era de lo más graciosa y no pude evitar reírme de él. Era tan, bueno, no encontré definición para él. Simplemente era tan EMMETT. 

-Emmett tiene razón – Alice se dirigió a mi limpiando una lagrima de sus ojos. No solo yo no pude evitar reírme – necesitas ser rescatada, aunque sea de la lluvia. 

- Pero no está lloviendo – le dije apenada porque no quería molestarlos. 

- Bella, ¿qué te dije? No apuestes contra Alice, solo vas a perder – me contradecía Emmett con los brazos en la cintura imitando la clásica pose de superhéroe. 

- Pero si yo no estoy apostando nada – dije inocente. 

Alice y Emmett me pusieron sus más serias caras (es decir sus caras de ruegos). Mientras el puchero de Alice era adorable, la imitación de Emmett más que risa daba terror. 

-Ok, me rindo. Es solo que no quería molestarlos – respondí ya vencida, más queriendo eliminar de mi cabeza el gesto de Emmett, porque de Alice era obvio que no se le podía decir que no – voy con ustedes, pero solo hoy. 

- Alice 1, Bella 0 – dijo Emmett para sí mismo pero aun así lo escuche. 

Keysha decía Alice. No, The Killers contestaba Emmett. Y así se la pasaron las primeras cinco cuadras hasta que - ¡Bella! – Gritaron a coro convirtiéndome en jurado – Cold Play – respondí ganándome unas sonoras carcajadas de Emmett y una cara de desaprobación de Alice por no haber elegido su opción. 

Era increíble como habían cambiado las cosas en cuestión de horas. No llevaba ni un día conociendo a estas dos maravillosas personas y ya sentía una amistad de años. Si la vida fuera tan fácil todos los días, gustosa abriría los ojos cada mañana. 

Una vez llegamos al hospital me baje del jeep de Emmett despacio evitando cualquier accidente, no quería un ingreso instantáneo a la sala de emergencias. 

-Arrivederchi – sonreí por el beso al aire de Emmett 

- Nos vemos – me refugie bajo el bolso ya que la lluvia empezaba a hacerse notar. 

- Nos vemos mañana Bella – se despedí Alice con un dulce abrazo – te dije que llovería – susurro con una sonrisa 

Después de todo lo que había pasado ese día pase una tarde muy tranquila, estuve una hora con mi padre mientras se empapaba del ambiente del hospital y luego me fui directamente a mi casa. Hice los trabajos para entregar el día siguiente, cene con mi madre en la cocina y me retire a mi habitación a las nueve de la noche. No había mucho que hacer más que dormir, así que decidí revisar mi correo. No pensé esperar a que cargara y me fui al baño a tomar un merecido baño, me vestí con mi piyama de algodón y cepille mis dientes. Una vez lista volví a mi computadora. 

Tienes 3 mensajes en tu bandeja de entrada (titilaba en la pantalla) 

Aburrido, los primeros dos simplemente spam; pero el tercero… 

Mensaje de Edward Cullen 

– Hola…

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listo nenas, tarde pero seguro... besitos!!!